No te estaría mintiendo si te dijera que ahora mismo pagaría porque el tiempo diera marcha atrás hasta anoche. Ahora, en este preciso momento daría lo que fuera por volver. Sinceramente fue una noche perfecta (como todas las noches y días que paso a tu lado), pero anoche fue diferente. Estuvimos riéndonos sin parar y haciéndonos cosquillas, tambien nos molestamos por una simple broma, una tontería... Pero volvimos a besarnos.
La verdad que hoy ha sido un día bastante raro, lo supe por el estado del cielo que tenía un color extraño que nunca había visto, era diferente por cualquier lado que lo miraras y puede parecer mentira pero me sentí vacía al mirarlo. No se que quería decir. Algo dentro de mi se iba durmiendo y sentí mucho más el frío. Tú.
Puedes creerme cuando te digo que lo pasé mal, muy mal y creo que aún ahora escribiendo esto me queda algún que otro resto de este sentimiento pésimo que tengo. No me lo creía, no me lo creo ¿cómo una pesadilla puede hacerse realidad? Por suerte fue un simple susto que me ha dejado mal, aunque hubiera insistido un poco más en que no hubiera pasado nada. Tenía y tengo miedo.
Se y sabes que eres lo más importante que tengo, lo más maravilloso que puede haber. Estás hecho perfectamente para estar en mi vida, conmigo, para siempre.
Anoche tuve la suerte de poder decirte a la cara lo que por ti siento, lo que significas para mí, lo mucho que te quiero. Y todas las veces que nos despedimos decirte "cuidado". Ahí afuera, el día está lleno de peligros e inseguridades, care.
Tenía y tengo miedo de perderte, eres todo lo que quiero, mi vida entera, mi cielo, mi oxígeno... Todo. ¿Y ahora? Quiero volver atrás, volver a estar encima tuya besándote el cuello, volver a escucharte decirme "te quiero". Esto, aunque tú no lo creas, tambien me afecta a mí, todo lo que te pase a ti; me ocurre a mi tambien. Si hay un día en tu vida en que esté lloviendo, en la mía cae un aguacero. Si tu sonríes, yo soy feliz.
